Ibraín Ramírez (CNP: 12.497). Una vez concluida la celebración de la Sagrada Eucaristía en la Basílica Menor de Santa Lucía, con motivo de los 63 aniversario del Movimiento de Cursillos de Cristiandad, este viernes tres de mayo, aproximadamente las siete de la noche, se dió inicio por las principales calles de la ciudad de Timotes al vialucis como antesala a la ultreya arquidiosesana prevista para el día siguiente.
Contó con la participación de doscientos cursillistas aproximadamente provenientes de Tovar, Bailadores, El Vigía, y otras comunidades del estado Mérida, siendo motivo de alegría y alabanza para el éxito de la ultreya.
Al día siguiente, en los espacios del Gimnasio Antonio Uzcategui de la localidad, se efectuó la gran concentración de cursillistas, que además de las comunidades antes mencionadas, también participó: algunos equipos de Ejido, zona centro y sur de Mérida, Pueblos del Sur, Pueblo Llano, Santo Domingo, Piñango, Chachopo, La Venta, incluso algunos equipos de la diócesis de Trujillo para acompañar a los diecisiete equipos de cursillo de cristiandad de la parroquia Basílica Santa Lucía de Timotes.
También, hubo la presencia en la Ultreya de Doce sacerdotes, incluyendo a nuestro amado padre Víctor Manuel Angulo muy querido en nuestra comunidad timotense; en comunión con el señor Arzobispo Metropolitano de la Arquidiócesis de Mérida Helizandro Emiro Terán OSA, quien presidió la celebración de la Sagrada Eucaristía, además de un importante número de ministros y servidores del altar.
Vale destacar que, en esta Ultreya contó con un himno propio para este magnánimo evento Arquidiocesano bajo la autoría de Leydi Terán, timotera residenciada en Chile, quien desde allá con su música y su letra se inspiró con las luces del Espíritu Santo para amenizar tan importante actividad del movimiento de cursillo de cristiandad.
Por su parte el presbítero Amilcar Lobo, Párroco y rector de la Basílica Menor de Santa Lucía de Timotes, manifestó su disposición para fortalecer los cursillos de cristiandad y para ello, ofreció: recursos humanos, tiempo y espacio para que en la Parroquia Basílica Santa Lucía, se continúen dando los cursillos de cristiandad para hombres y mujeres.
Igualmente el padre Ronald Rojas Asesor del movimiento de cursillos se mostró satisfecho por el éxito de la ultreya, pues además de contar con la presencia de un número importante de sacerdotes y ministros del altar, se logró reunir aproximadamente novecientos cursillistas de la arquidiócesis de Mérida.