Especial: Ibraín Ramírez. CNP 12.497. Este sábado 2 de noviembre, a las 12:00 m, en el campo santo de la comunidad de Chachopo, el padre Oscar Contreras, cura párroco de esa comunidad, celebró la sagrada eucaristía por los difuntos.
Desde el día antes los familiares visitaron las tumbas, donde yacen sus seres queridos para elevar sus oraciones, colocar flores y embellecer el lugar.
La sagrada eucaristía, celebrada bajo la bendición de una tenue brisa, fue amenizada por el coro de la parroquia y acompañada por el diacono Donato Ramírez.
Previo a la celebración, se dio lectura a las listas de los nombres de los difuntos cuyos familiares anotaron e hicieron intensión en este día y posteriormente las listas fueron incineradas en señal de elevación de sus almas al cielo.
El padre Oscar Contreras, en su homilía se refirió a la iglesia en la sagrada misión de servirle a Dios y servir a la humanidad y a la importancia de la oración, enfatizo que: La finalidad en este día es orar por los fieles difuntos, por su eterno descanso.
Cuando nosotros oramos, entramos en el recinto de Dios, La oración llega a Dios, las flores se marchitan, la oración no, la oración se eleva y Dios la recibe.
Igualmente se refirió al servicio por los demás, es muy importante sentirse útil a la sociedad, visitar al enfermo, darle de comer al hambriento, esa es la obra que Dios recompensa.